Síntomas de la alergia a las pulgas

Consisten en prurito en el vientre, la espalda y las extremidades de las patas, acompañado de lesiones características localizadas en un triángulo dorso-lumbar (cuya base se sitúa en los lomos y la punta hacia la mitad de la espalda).


Se aprecia disminución del pelaje, pelos rotos y sobre coloreados (más visibles en los perros blancos), y piel hinchada que rezuma.



Síntomas de la alergia a las pulgas en los perros






Existen formas mucho más discretas así como una sobreaguda con aparición en pocas horas de una placa supurante, generalmente en el muslo, que el animal se lame y muerde furiosamente.



El veterinario hará un diagnóstico en función de los síntomas existentes y la presencia de pulgas o sus excrementos en el animal o en sus congéneres (menos de la mitad de los casos). Por lo demás, el facultativo podrá recurrir a un test alérgico por intradermorreacción, que no siempre resulta positivo.

Patologias en la cadera del perro

En el perro, la articulación de la cadera puede sufrir lesiones muy diversas que pueden producir una invalidez mayor o menor. Algunas se resuelven con un tratamiento médico, mientras que otras necesitan intervención quirúrgica.
De las diferentes clasificaciones existentes se desprende finalmente que tales lesiones se pueden dividir en dos grandes categorías:


Afecciones traumáticas (luxaciones coxofemorales, fracturas del codio, fracturas del cuello y la cabeza del fémur) ; afecciones no traumáticas (displasia, artrosis primitiva, necrosis aséptica, epifisiolisis).


Tipos de patologias en la cadera del perro


LAS LESIONES TRAUMÁTICAS


En el perro accidentado, el examen clínico del miembro herido se hace sobre los radios óseos y cada una de sus articulaciones. Este examen, generalmente doloroso, debe completarse con un examen neurològico y un examen radiológico que permitirá localizar de forma precisa la fractura o la luxación. A la vista de las radiografías, el veterinario podrá tomar las medidas terapéuticas que se imponen: inmovilización con escayola o, más frecuentemente, reparación quirúrgica. En el tratamiento de las fractura de cadera complejas se aplican técnicas cada vez más modernas, derivadas de la cirugía humana.






LAS LESIONES NO TRAUMÁTICAS


Displasia de la cadera


Las displasias representan el 71% de las lesiones no traumáticas de la cadera. La displasia (también llamada displasia coxofemoral) es una afección hereditaria que se caracteriza por el desarrollo anormal de la articulación coxofemoral, una anomalía que concierne tanto a la forma de la cavidad cotiloidea como a la cabeza femoral. En cuyo caso el juego de la articulación es de mala calidad: los especialistas hablan de mala congruencia articular. La displasia de la cadera es muy frecuente en el pastor alemán y otras razas de tamaño grande, pero también se observa en perros de tamaño mediano y cada vez más a menudo, según parece, en perros pequeños.

Anorexia en perros

La anorexia es, por definición, la pérdida del apetito; la polifagia, por el contrario, es el aumento del apetito.


Causas de la anorexia en perros


Las causas de la anorexia son muchas y variadas. Actúan ya sea inhibiendo la actividad del centro del hambre, ya estimulando la del centro de la saciedad. Se .suelen distinguir dos tipos de anorexia: según su origen, la anorexia puede ser primaria o secundaria.


La anorexia primaria
Directamente relacionada con trastornos de origen neurològico, este tipo de anorexia puede estar asociado con lesiones del sistema nervioso central (tumor, hidrocefalia, traumatismo, edema cerebral, infección) o formar parte de un síndrome psiquiátrico causado por la ansiedad, el estrés o un trastorno del comportamiento alimentario.


Por ultimo, la anorexia primaria puede traducirse en la pérdida de olfato.




La anorexia secundaria


Esta anorexia, caracterizada por la ausencia de lesiones del sistema nervioso central, puede estar relacionada con un dolor (abdominal, torácico, muscular, articular, óseo...), con una lesión abdominal (inflamación, tumor, distensión abdominal), con la acción de productos tóxicos industriales o medicamen¬tosos, con la presencia en la sangre de catabolitos endógenos que inhiben el apetito, así como también con la evolución de enfermedades crónicas endrocrinas o no (diabetes sacarina, insuficiencia renal o cardíaca...). Por último, frecuentemente, la anorexia secundaria va acompañada, de fiebre.

La obesidad en el perro

Si su perro sufre de gordura, es necesario revisar su alimentación, y asegurarse de que sus kilos superfluos no se deben a otros desajustes.


OTRAS CAUSAS


El origen de la obesidad no siempre es la sobreali¬mentación. Hay que tenerlo en cuenta antes de iniciar un régimen. Se estima que un 25% de los perros obesos sufren de hipotiroideas.

Por otra parte, se conoce la tendencia de los animales castrados a ganar peso (las estadísticas muestran que esta tendencia aumenta en las hembras), aunque parece que la esterilización induce a la obesidad solamente por las razones psíquicas que de ella resultan, puesto que las inyecciones de hormonas sexuales en los animales castrados no corrigen el sobrepeso así adquirido.





Por el contrario, las glándulas suprarrenales producen mucho Cortisol, que desarrolla el síndrome de Gushing, caracterizado por un abdomen dilatado, la caída del pelo, y unos músculos fofos. Un animal que presenta estos síntomas, bebe y orina mucho y se sacia difícilmente.



En fin, conviene mencionar la rarísima lesión del hipotálamo (un tumor por ejemplo), centro de la saciedad. Una perturbación de su funcionamiento puede ser responsable de un hambre inmoderada.



Menos convencional y más frecuente, el sobre-consumo alimenticio de origen psicológico entra en lo que se llama la obesidad del estrés. Un perro con buena salud puede volverse bulímico en respuesta al estrés o a un choque psicoafectivo.

Ciertos casos de obesidad se observan igualmente en los perros «víctimas» de un exagerado cariño por parte de su amo, que se traduce en golosinas. Es cierto, que sea el que sea el motivo de la consulta, el veterinario debe tener en cuenta siempre el medio que rodea, psicológica y afectivamente, al perro.



Como vencer la obesidad en el perro



Algunas recomendaciones simples al respecto, suficientes para corregir o para evitar, el sobrepeso, siempre propicio para otras complicaciones:



1. Convencerse del estado de obesidad de su perro y contar todo lo que el animal come durante el día.


2. Reducir en un 20 o 40% el valor energético de su ración (sin disminuir su volumen, pues los nutricionistas han demostrado que el perro acostumbrado a un cierto volumen de alimentos, tiende a mantenerla, incluso si la alimentación es menos energética).


3. Fraccionar la ración a lo largo del día (es mejor darle varias raciones pequeñas a lo largo del día).



4. Utilizar los alimentos preparados del comercio, cuya garantía nutricional es conocida, o mejor aún, los alimentos dietéticos, vendidos por los veterinarios, especiales para vencer la obesidad.



5. Prescindir de las golosinas, muchas veces responsables de las redondeces desgraciadas: la galleta de la mañana, el trocito de queso a mediodía, la pequeña golosina de la noche delante del televisor.



6. Hacer que beba tanta agua como sea posible.



7. Imponerle un ejercicio físico regular.



8. Establecer un programa preciso de adelgazamiento junto con el veterinario que le trata.



9. Comprobar regularmente los progresos obtenidos con ayuda de una balanza y apuntar los resultados en un diagrama.



10. Una vez que se encuentre en forma, mantener un régimen de conservación para evitar una recaída (este régimen será inferior en un 10% a lo que el perro comía antes de estar obeso).



El sentido común de los humanos nos indica que la solución es comer menos. Muchas personas dicen que se sienten bien como son. «¡y tanto mejor si tienen kilos superfluos!»

Nuestros perros no conocen estos estados de ánimo propios de su amo y por lo tanto debemos evitarles los inconvenientes de una sobrealimentación. El único placer que encuentran en comer demasiado es semejante al que podamos encontrar nosotros cuando nos aburrimos.

En casos extremos, la última solución es la hospitalización bajo la vigilancia del veterinario. Todavía no hay balnearios para perros.

Artrosis en los perros

La artrosis es una afección crónica degenerativa que afecta a las articulaciones de las patas delanteras o traseras y a las de la columna vertebral. Según la gravedad del mal, se podrá constatar reducción de la movilidad, anquilosis y hasta bloqueo completo.


La artrosis se llama científicamente osteoartritis crónica o artropatía. Se caracteriza por la degeneración del cartílago articular con una proliferación ósea en el borde de las superficies articulares. Estas excrecencias óseas se llaman «osteofitos». A la altura de la columna vertebral se habla más comúnmente de picos de loro debido a su aspecto radiológico, muy parecido al pico de los psitácidos (familia de la que forman parte los loros).



Causas de la artrosis en los perros


La causa real de la artrosis se desconoce, aunque la afección se deba al envejecimiento normal de la articulación y a los traumatismos inhabituales soportados por el cartílago articular.






La artrosis puede ser primaria o secundaria. La primaria se caracteriza por la ausencia de un factor desencadenante inicial, mientras que la segunda es consecutiva a un episodio agudo de artritis (véase el recuadro). La intervención de la edad parece evidente en el primer caso pues esta forma de artrosis se encuentra muy raramente en los ejemplares jóvenes.



La artrosis también puede aparecer cuando existen malformaciones articulares: así, la evolución de la displasia coxo-femoral conduce ineluctablemente a la formación de osteolitos bien visibles radiológicamente.



Síntomas de la artrosis en los perros



El síntoma más evidente de la artrosis es la cojera que se manifiesta sobre todo en frío cuando el perro se acaba de levantar por ejemplo, y disminuye a medida que el ejercicio calienta la articulación. La artropatía, en efecto, provoca dificultades para molerse y produce un dolor que puede ser más o menos intenso; el examen de la articulación en sus posiciones extremas hará que el animal se queje.



Si el animal es obeso —caso frecuente en el ani¬mal artrósico— la degeneración de la articulación (que soporta un peso excesivo) se efectúa más rápidamente y las manifestaciones clínicas son más precoces: crujidos cuando se mueve la articulación, hi-pertrofia de ésta, musculatura a menudo atrofiada debido a la disminución de la actividad física.



Salvo que la artrosis sea consecuencia de un trau¬matismo localizado, se observa sobre todo en su forma poli articular. Incluso cuando se lleva el animal a la consulta a causa de una molestia en la pata el examen descubre muchas veces la existencia de lesiones en otras articulaciones.

Verificación y vacunación en el cachorro

La verificación no presenta peligros en la actualidad, gracias a los antiparásitos modernos. Puede aplicarse desde la edad de tres semanas pues no hay que olvidar que el cachorro, aunque no haya salido nunca, puede ser portador de parásitos que su madre le haya transmitido durante la gestación.


En cuanto a la vacunación, debe tomar el relevo de los anticuerpos maternos que desaparecen al cabo de la octava semana. Así pues, transcurrido ese período habrá que proceder a la vacunación contra la enfermedad de Carré, la hepatitis de Rubarth y la parvo virosis.


Verificación y vacunación en el cachorro recién nacido


En los lugares que presentan riesgos (establecimientos de cría con numerosos efectivos, por ejemplo) se puede vacunar antes a condición de multiplicar las precauciones. Si las condiciones de vida son mejores se puede esperar perfectamente hasta los dos meses para hacer la primera vacunación.






Los dos primeros meses de la vida del cachorro condicionan realmente su futuro: por eso es tan importante cuidarlo en ese periodo durante el cual se efectúan las intervenciones de «conveniencia» (como la cordectomía o amputación de la cola en las razas cuyo estándar lo exige, y el tatuaje).

El esqueleto del perro

El esqueleto desempeña en el perro, igual que en todos los demás vertebrados, una función de armazón que asegura el indispensable sostén del cuerpo, protege el sistema nervioso y sirve de soporte de la musculatura.


El esqueleto del perro se compone de dos partes principales: el esqueleto de los miembros y el axial.


Las patas traseras y delanteras reúnen 92 huesos del cuerpo. Por su parte, el esqueleto axial comprende el espinazo (50 huesos), el cráneo y el hueso hioides (50 huesos), las costillas y el esternón (34 huesos). Por último, el macho tiene un hueso más, el peniano.


Según la forma que tienen, los huesos se dividen en huesos largos y huesos cortos, sesamoideos, huesos planos y huesos irregulares. Los huesos largos, cortos y sesamoides son los de los cuartos mientras que los huesos planos e irregulares componen el esqueleto axial.







Como esta formado el esqueleto del perro


EL CRÁNEO


El cráneo es la parte más compleja del esqueleto. Alberga el cerebro, los órganos de los sentidos y la glándula endocrina más importante, la hipófisis; a su altura se encuentran las uniones con los dientes, la lengua, la laringe, y muchos músculos, vasos y nervios.


El cráneo se divide en dos partes: una corresponde a la región facial y palatina; la otra a la cavidad craneana. A ellas se añaden otras dos formaciones, la mandíbula inferior y el hueso hioides, es decir, el hueso de la base de la lengua.


LA COLUMNA VERTEBRAL


La del perro se compone de 7 vértebras cervicales, 13 vértebras torácicas, 7 vértebras lumbares, 3 vértebras sacras y de 6 a 20 vértebras cocxígeas. A las 13 vértebras torácicas se articulan 13 pares de costillas, la última de las cuales se llama flotante porque queda libre en el tejido muscular. El esternón está formado por ocho segmentos óseos sobre los que se ar¬ticulan los 9 primeros pares de costillas.



LOS CUARTOS DELANTEROS


Comprenden el hombro, constituido a su vez por el omoplato y la clavícula (rudimentaria en la especie canina), el brazo, formado únicamente por el húmero, el brazuelo, compuesto por el cubito y el radio (a menudo llamado ulna) que se articulan con el húmero por el codo, y, por último, la mano, que está formada por el carpo, metacarpo y las falanges.


LOS CUARTOS TRASEROS


Cada cuarto trasero empieza por una henipelvis constituida por 4 huesos soldados entre sí: el ilion, el isquion, el pubis y el acetábulo.


El muslo está formado por el fémur que se articula a la altura de la rodilla con la tibia y el peroné (también llamado fíbula) que forman la pierna. La rodilla comprende, además, la rótula y tres huesos sesamoideos (fabellae).



La pierna, terminada en el tobillo, se prolonga en el pie, el cual se compone de tarso, metatarso y falanges.

Alergia a las pulgas

Aunque la picadura de pulga pueda parecer tonta e inofensiva, suele ser la causa más frecuente de enfermedades de la piel adquiridas. Esas alergias repetitivas sólo se pueden evitar con insecticidas.



Muchos propietarios constatan cada año la aparición en sus animales de lesiones que califican de eccema. En realidad, esta dermatitis es consecuencia de una alergia a la picadura de pulga.


Esta enfermedad se ha estudiado experimentalmente, y se ha podido demostrar que la saliva de las pulgas contiene sustancias capaces de combinarse con determinados componentes de la piel y formar antígenos. Entonces se desencadena un verdadero proceso alérgico cuyas consecuencias son espectaculares y mucho más graves de lo que pueda serlo la simple presencia transitoria de algunas pulgas. Esta afección es tanto más preocupante si se tiene en cuenta que no todos los perros tienen la misma propensión a contraerla pero sí todos albergan parásitos en uno u otro momento del año.


Alergia a las pulgas en los perros


La aparición estacional de esta afección es muy clara. En efecto, el período de actividad de las pulgas comienza a finales de la primavera y termina en otoño. En todo caso, si los parásitos han podido instalarse en el domicilio de los animales, éstos pueden sufrir el trastorno durante todo el año.






En teoría, basta una sola pulga para que se desencadene el proceso alérgico. El parásito más frecuentemente causante es la pulga del gato. Puede ocurrir que en la vivienda sólo haya un perro con alergia mientras que los demás perros y los gatos (estos últimos son mucho menos sensibles a los parásitos) están aparentemente sanos. Algunas razas, en especial los pastores alemanes, los setters, los terriers y los dálmatas, parece que tengan propensión a la dermatitis. Pero todas las razas pueden verse afectadas puesto que se trata de una sensibilidad individual.



La aparición de los primeros trastornos se produce entre el primer y tercer año, muy raramente antes. Pero los dueños no se dan cuenta y .sólo se inquietan cuando los síntomas resultan preocupantes hacia los cuatro o cinco años de edad.

Hiposexualidad en las perras

Impuberismo:




Una perra puede no haber tenido nunca ciclo sexual. En ese caso se habla de impuberismo. Esta anomalía puede tener una causa «central» (insuficiencias hipofisaria, tiroidea o hipotálamo-hipofisaria) o «gonádica» (afectando a los ovarios).


En caso de insuficiencia hipofisaria, se notarán síntomas más evidentes como enanismo armonioso, delgadez y trastornos cutáneos, mientras que la insuficiencia tiroidea va acompañada de enanismo cinámico.

En ambos casos, los órganos sexuales no se han desarrollado. Una simple perturbación del eje hipotálamo-hipofisario no es identificable clínicamente; para ser diagnosticado, se necesitan «test de estimulación» que imiten la acción de las hormonas naturalmente enjuago.



El impuberismo se explica también por un mal desarrollo del ovario (digénesis, hipoplasia o aplasia). Para confirmar el diagnóstico hay que prever muy a menudo una abertura quirúrgica del abdomen llamada «laparotomía exploradora», que actualmente se sustituye por una endoscopia.



Como en la Hiposexualidad en las perras



Hiposexualidad secundaria:




Cuando la perra ya ha tenido ciclos normales y éstos se hacen cada vez más atenuados con un celo reducido y hasta ausente, se trata de un hipo sexualidad secundaria.
La obesidad es sin duda luyo de los síntomas clínicos que más a menudo se asocian con la hipo sexualidad. Igualmente, la hembra en estado pletórico suele ser infértil.

En realidad, la gordura es la manifestación de diversas causas de la hipo sexualidad de origen central.



Es el caso de las insuficiencias hipofisaria o tiroidea, es el caso también del «síndrome de casting» (insuficiencia suprarrenal). Todas estas afecciones van acompañadas de manifestaciones clínicas variadas y a menudo difíciles de atribuir a una patología precisa. El facultativo tendrá que recurrir a exámenes complementarios (dosificaciones hormonales, test de ex)cloraciones funcionales...).

La vermifugación

La Vermifugación del perro es un hecho trivial que se realiza muchas veces sin preparativos especiales. Ahora bien, a lo largo de su vida el perro está más o menos expuesto, según como se le cuide, a riesgos parasitarios que necesitan tratamientos, los cuales han de ser escogidos con el mayor cuidado para que sean eficaces.


El perro puede albergar varias docenas de especies de lombrices diferentes. Todos los órganos pueden verse afectados pero los más frecuentes son, de lejos, los parásitos del tubo digestivo. Algunas lombrices pueden ser objeto de un tratamiento regular: la Vermifugación.



Los lombrices (también llamadas helmintos) se clasifican en dos grandes grupos: por una parte, el de los cestodos, corrientemente llamados tenias, que son lombrices planas y segmentadas que forman una cinta más o menos larga, y, por otra, los nema-todos o lombrices redondas.



Estos dos grupos no tienen la misma importancia en el plano patológico: los primeros, contraídos por el perro cuando éste ingiere el huésped del parásito, se toleran bien por lo general; los segundos (al menos, las principales especies) no tienen huésped intermediario; a veces los transmite la madre al cachorro y pueden producir trastornos graves.



¿POR QUÉ VERMIFUGAR?





Las razones son múltiples; no sólo se deben al perro, claro está, sino también a los demás animales y, a veces, al hombre.



La Vermifugación en los perros



Algunos parásitos del tubo digestivo pueden provocar graves trastornos que pongan en peligro la vida del animal. Así, los ascárides, cuando están presentes en grandes canddades, pueden llegar a formar pelotas que, al bloquear el intestino, pueden crear complicaciones de oclusión intestinal.

Los anquilostomas, incluso en número reducido, dan lugar a veces a una anemia mortal en el cachorro. Otros parásitos, por fortuna más raros, como los espirocercos del esófago o las anguígulas, pueden también provocar la muerte.



Sin embargo, lo más frecuente es que el parasitismo se presente de forma insidiosa: por raquitismo y desarrollo defectuoso cuando el animal enfermo está en periodo de crecimiento, por malestar general y pelaje descolorido cuando el animal es adulto.



Los demás animales

El perro contaminado libera una multitud de huevos del parásito en sus materias fecales a lo largo de varios meses. Esos huevos son muy resistentes y pueden permanecer en el suelo durante varios años.



En el caso de las lombrices redondas (ascárides, anquilostomas, triquinas) son las larvas que nacen de la evolución de los huevos las que puede infestar a los demás perros y el animal parasitado primero puede quedar también dinfestado si se encuentra en un medio cerrado.

En el caso de las lombrices planas (cestodos), los huevos sólo pueden desarrollarse en otro animal, el huésped intermediario. Este es el que transmitirá el parásito al perro que lo consuma. Otra modalidad, es la transmisión del parásito por la perra a su descendencia ya sea in útero, es de¬cir, durante la gestación, ya a través de la leche. Así, más del 90% de los cachorros están ya parasitarios cuando nacen.



El hombre

Los perros parasitarios por ciertas lombrices digestivas constituyen un peligro para el entorno (las enfermedades que el animal puede transmitir al hombre llevan el nombre de zoonosis.



Las larvas de anquilostomas presentes en el suelo pueden atravesar la piel y desplazarse antes de degenerar. Son las causantes de enfermedades cutáneas en los climas húmedos y cálirios.


Los huevos de ascárides, por su parte, pueden ser ingerirlos accidentalmente. Los niños que juegan con los perros o en el suelo son los más expuestos y sensibles. Las larvas se dispersan por su organismo, realizando una larvamigrans visceral con fiebre, signos pulmonares y a veces trastornos oculares. El riesgo es particularmente elevado en los niños que juegan en la arena de los jardines públicos que haya sirio ensuciada por los perros. Esto parece suficiente para justificar la prohibición de acceso de los perros a los jardines.


Los huevos de la tenia equinococo también pueden ser absorbidos, ya sea por manipulación de un perro parasitario, ya por alimentos sucios (legumbres insuficientemente lavadas). Las larvas se desarrollan en el hígado y son las causantes riel temible quiste hidatídico.



Sin pretender dramatizar el impacto de estas zoonosis, hay que saber que existen para que torios los propietarios de perros se decidan a tomar las medidas preventivas que se imponen.

Hipersexualidad en las perras

También llamada hiperestria en el caso de la perra, esta afección parece relativamente rara. Al contrario de lo que ocurre con la hiposexualidad, se observa un acortamiento de los intervalos entre los estos: el celo no sólo es irregular sino también más frecuente.


Además, muchas veces se prolonga durante más de un mes. La hembra «desfasada» es infértil desde luego.


Que es la hipersexualidad en las perras


También presenta trastornos comporta mentales que recuerdan las manifestaciones del celo. El agravamiento de dicho estado, llamado ninfomanía, es rarísimo en la especie canina.


La hiperestria corresponde asimismo a trastornos «centrales» o «gonádicos», y puede aparecer como consecuencia de un tratamiento abusivo con estrógenos.

Cuando consultar con el veterinario

Siempre que algo raro le llame la atención de su perro, consulte con el veterinario. Aspectos relacionados con la apariencia física de su perro, pero también hágalo si percibe cambios notables en su comportamiento.

Aunque tenga un aspecto sano, al perro adulto debería revisarlo el veterinario cada seis meses aproximadamente. Si se ha acostumbrado al perro a revisiones periódicas desde cachorro, ésto no supondrá ningún trauma para él.






Cuando se deberia consultar con el veterinario


Debería apuntar los siguientes datos:


-¿Tiene en ocasiones fiebre?

-¿Ha notado algún cambio en el perro?

-¿Qué aspecto tienen sus excreciones (orina, heces, quizá vómito)?

-¿Lo ha desparasitado y vacunado hace poco?

-¿Qué enfermedades ha tenido?

-¿Cuál es la dieta de su perro?

-¿Cómo se comporta el perro?

Anemia en los perros

La anemia es un conjunto de síntomas caracterizados por la disminución del porcentaje de hemoglobina en circulaión, asociada casi siempre a un descenso del número de glóbulos rojos. Clínicamente, la anemia se manifiesta en forma de palidez de las mucosas bucales y genitales. Se distinguen varios tipos de anemias que responden a mecanismos variados y desembocan en terapéuticas y pronósticos muy diferentes.


Causas de la anemia en los perros



Así, en el perro, la anemia puede deberse a un aumento anormal de la hemolisis (destrucción de los glóbulos rojos), lo que define las anemias hemolíticas, o a una insuficiencia en la producción de hematíes por la médula espinal (encargada fisiológicamente de producir los glóbulos jóvenes).



Evidentemente, también una hemorragia puede ocasionar la pérdida masiva de glóbulos rojos.


Las anemias hemolíticas


Son las más frecuentes, debido precisamente a la gran frecuencia de algunas de sus causas, en particular la piroplasmosis, también llamada babesiosis (esta enfermedad transmitida por las garrapatas causa la destrucción de los glóbulos rojos en circulación).

Ese tipo de anemia se traduce no sólo en la palidez de las mucosas sino también en la coloración anormal de la orina; la hemoglobina, contenida en los hematíes, se elimina entonces por la orina y da la coloración «poso de café» que se observa en todas las hemolisis masivas. A veces, la anemia va acompañada de ictericia (véase la ficha ictericia) caracterizada por la coloración amarillenta de las mucosas bucales y genitales.





En el perro también se dan otras causas de hemolisis, en particular causas inmunológicas; el organismo ya no reconoce sus propios glóbulos rojos y elabora anticuerpos para destruirlos. Este tipo de anemia hemúlida puede producirse de pronto sin razón aparente, o ser la secuela, por ejemplo, de una piroplasmosis.



La hemolisis puede deberse también a la ingestión de sustancias tóxicas, en particular de ciertos herbicidas, a la absorción de bulbos, nitratos, azid de metilene... Por último, en el perro, en particular en la raza basenji, se han descrito anemias hemolíticas de origen genético y otras relacionadas con cierto déficit enzimático.



Las anemias de origen medular



Las anemias originadas por una insuficiencia de producción de glóbulos rojos por la médula responden a varios mecanismos. En condiciones fisiológicas, la producción de hematíes requiere la presencia de una hormona de origen renal, la eritropoyetina, la presencia de células matrices a partir de las que se producirán los futuros hematíes, la presencia de materiales necesarios para la fabricación y montaje de los elementos que constituyen el glóbulo rojo, en particular el núcleo y la hemoglobina.



La producción de hematíes por la médula espinal puede quedar perturbada por diversas razones: reducción de la síntesis de la eritropoyetina por el riñón, en particular en los casos de insuficiencia renal, provoca la disminución de la cantidad de células matrices; estas últimas también pueden quedar bloqueadas por células tumorales o por ima esclerosis que invada la médula; también pueden ser destruidas por agentes citotóxicos, por ejemplo antimitóticos utilizados en el tratamiento de ciertos cánceres en el perro.



Por último, los elementos indispensables para la formación del núcleo del hematíe (en participar vitamina B9, vitamina B12) o la formación de la hemoglobina (hierro) pueden faltar debidos esencialmente a la insuficiencia de aporte en razón de trastornos digestivos crónicos (diarreas crónicas de origen parasitario, tumores del tubo digestivo).



EXÁMENES PUNTUALES


Las causas de las anemias en el perro son numerosas y, antes de tratarlas específicamente, resulta importante identificar y cuantificar la ámenla para poder clasificarla en el grupo correspondiente de las anemias hemolíticas, ya sea en el de las anemias por pérdida (hemorragias) o en el de las anemias de origen medular.


A partir de la muestra de sangre conservada en un tubo que contiene anticoagulante, el veterinario realizará dos exámenes:



— un primer examen cuantitativo, realizado con un contador automático, que permitirá determinar el número de glóbulos rojos, la tasa de hemoglobina, el número de glóbulos blancos y su distribución; el cálculo de ciertos índices (véase el recuadro en la ficha «Las normas biológicas») también permite caracterizar la anemia (concentración corpuscular media en hemoglobina, tasa globular media en hemoglobina, hematocrito); asimismo, es importante conocer la tasa de reticulocitos: estas células corresponden a las formas amarillas de glóbulos rojos, y es indispensable contarlos si se quiere evaluar la capacidad de producción medular frente a una anemia;



— en un segundo paso se procede a un examen cualitativo; en un frotis de sangre extraída, el veterinario podrá buscar eventualmente la presencia de parásitos (piroplasmosis), observar la morfología de las hematíes...



Gracias a los resultados de estos análisis y al examen clínico, completado en caso necesario con otras mediciones (bilirrubina de la sangre, urea...) y exploraciones (punción de médula espinal), el facultativo podrá definir la anemia, determinar sus causas y, por consiguiente, decidir la terapéutica adecuada.



UNA TERAPÉUTICA ETIOLÓGICA


El tratamiento de la anemia es causal ante todo. Tratar una anemia hemolítica de origen piro plasmático requiere en primer lugar el tratamiento del paraplasma. El tratamiento de una anemia por pérdida requiere la búsqueda de la hemorragia; una intervención específica, quirúrgica o no, se acompañará de transfusión sanguínea en caso necesario. El tratamiento de las anemias de origen medular puede requerir igualmente una transfusión, o, simplemente, la suspensión del tratamiento antimitótico en caso de cáncer.



Excepcionalmente, puede resultar indispensable administrar hierro o vitamina B12 a los animales anémicos, pero estas prescripciones deben estar totalmente fundadas.

La zooterapia

El diccionario define la zooterapia como «la terapia para los animales, la medicina veterinaria». Pero es bajo otra acepción que el término zooterapia se conoce hoy día, acepción que le ha sido dada por el Instituto Canadiense de Zooterapia, según la cual se trata de una «terapia facilitada por el animal».



HISTORIA DE LA ZOOTERAPIA


Las primeras observaciones que demostraron la aportación de los animales en ciertas terapias para enfermedades mentales tuvieron lugar en Inglaterra en 1792. Sin embargo, las primeras publicaciones que recogen los resultados de la terapia facilitada por los animales son posteriores a 1960.





En Estados Unidos, los recientes trabajos de Levinson y Corson, psicólogos para niños y adolescentes, han demostrado la aportación de los animales en los tratamientos de trastornos psíquicos graves. Estos dos eminentes especialistas han creado la «Pet Oriented Child Psy-chotherapy» (que podría traducirse por psicoterapia infantil mediante mascotas).


Son importantes los trabajos del doctor Condoret sobre el rol de los perros y otros animales domésticos en los tratamientos de niños con retrasos en el desarrollo del lenguaje y con niños autistas.


¿QUÉ ES LA ZOOTERAPIA?

La zooterapia, en su sentido de «terapia facilitada por el animal», utiliza la relación ¿que se establece entre una persona y su animal de compañía. Los animales son utilizados como catalizadores terapéuticos, susceptibles de provocar un cambio positivo en el comportamiento emocional del paciente y por consiguiente de mejorar su calidad de vida.

Esta terapia tiene efectos tanto en el aspecto fisiológico como en el psíquico. En el plano fisiológico, Katcher y Friedman han demostrado que el hecho de acariciar a un animal de compañía reduce de forma significativa la presión arterial.

En el plano psicológico, el animal aparece como un catalizador de las relaciones sociales; favorece la comunicación, y es también un soporte afectivo, una fuente de alegría y de cariño.



INDICACIONES Y CONTRAINDICACIONES DE LA ZOOTERAPIA


Esta terapia no es una panacea, es necesario conocer sus limitaciones.
Está especialmente indicada en la soledad, la depresión, los problemas emocionales, el estrés, los problemas sensoriales y motrices. Cuando es necesaria una larga hospitalización, el animal puede también ayudar a soportar el cuadro del hospital.


También puede ayudar al enfermo a salir de su estado patológico: el animal ayudará desde muy pronto al médico, que encontrará en él un excelente medio para entrar en contacto con su paciente para hacerle expresar sus problemas.


Las contraindicaciones existen, aunque son raras. Conciernen a aquellos pacientes que sufren afecciones que les obligan a vivir en habitaciones estériles, a los que sufren alergias a los pelos o las plumas de animales y, finalmente, a aquéllos cuya capacidad mental no les permite encargarse de un animal.


ALGUNOS EJEMPLOS DE SU APLICACIÓN




Los medios institucionalizados (hospitales, casas de retiro, prisiones) contribuyen a la despersonalización del individuo, que progresivamente pierde su status social. Así, el enfermo, rodeado por un medio que le es hostil, reaccionará con el mutismo o, por el contrario, con la agresividad.

El animal se rinde «a toda cosa humana», afirma el doctor Méry; en efecto, permite establecer una comunicación entre el paciente y el personal del establecimiento.


En las casas de retiro, los perros mascotas, han devuelto el gusto por la vida a muchos residentes, que han descubierto la alegría de ocuparse de estos animales (lavarlos, pasearlos, etc.). Centro de interés para todos, el perro disfruta también de este privilegio.


La adopción de perros y gatos por los detenidos en las prisiones americanas ha favorecido notablemente la rehabilitación de sus dueños. El animal, en estos casos, representa una línea positiva entre el mundo carcelario y el exterior.


CUADRO DE LA RELACIÓN TERAPÉUTICA HOMBRE-ANIMAL



En lo sucesivo y en el cuadro de una zooterapia, el animal y el veterinario estarán junto a los médicos en las instituciones especializadas. El veterinario tendrá la responsabilidad no sólo de la salud del animal, sino también de su equilibrio, y participará activamente en su educación. Fijando una serie de reglas para la correcta utilización del animal, tendrá a su cargo el preservar su calidad de vida.

Tratamientos para pulgas

Como, en definitiva, se trata de una enfermedad alérgica, el tratamiento se basa en la eliminación de las pulgas que deñen el perro y los animales con los que aquel está en contacto (en especial el gato, que suele ser portador) así como el medio en que viven unos y otros.

Esa destrucción es extremadamente delicada ya que las pulgas están poco tiempo en los animales y son muy resistentes en el entorno. En algunos países existen empresas especializadas en la destrucción de tales insectos en las viviendas.


Si las lesiones no se tratan adecuadamente, evolucionarán durante meses con el engrosamiento y endurecimiento de los tejidos de la piel de las zonas afectadas.


Tratamientos para pulgas en los perros


Por lo general, los síntomas remiten espontáneamente en invierno y reaparecen, más graves, al año siguiente. Pueden controlarse empleando sustancias antiinflamatorias que se administran únicamente por vía bucal.

Sobre todo es muy importante prevenir las recaídas que se producirán indefectiblemente cada vez que el perro coja pulgas. Para lo cual se han de utilizar todos los medios posibles, sobre todo durante la estación propicia para las pulgas.

Los champús antiparásitos no tienen ningún efecto, los collares anti pulgas sólo les sirven a los perros pequeños o de pelo raso. Los polvos, lociones y aerosoles insecticidas son desde luego las medidas más eficaces.

Reanimar al cachorro

El futuro del cachorro se decide a lo largo del período comprendido entre el nacimiento y el destete. Por consiguiente, durante las primeras semanas habrá que cuidarlo de un modo especial.


El cachorro puede necesitar cuidados de urgencia tras la expulsión. Es lo que se llama reanimación neonatal. Todos los propietarios de perros deberían conocer los gestos elementales, pues un día u otro pueden verse en la necesidad de practicarlos.


Como Reanimar al cachorro cuando recién nace



En primer lugar, es indispensable saber extraer el cachorro de sus envoltorios fetales, pues de lo contrario correría peligro de inhalar líquido y morir asfixiado. A continuación se limpiarán la boca y los ollares de las mucosidades que hayan podido penetrar; para ello, lo más sencillo es tener suspendido el cachorro por las patas traseras.

Si esta maniobra no basta para que empiece a respirar, se puede soplar con fuerza en la nariz del cachorro; si eso no funciona, se puede intentar desencadenar el reflejo salvador sumergiendo muy rápidamente la cabeza del animal en agua fría.


En todo caso, cuando el cachorro haya empezado a respirar, habrá que secarlo. La madre se encarga instintivamente de esta operación que, sin embargo, no siempre está exenta de peligros; en efecto, cuando la perra ingiere los envoltorios fetales y corta con los dientes el cordón umbilical, existe el peligro de que, si el cachorro no grita, lo devore al mismo tiempo que la placenta.

La lactancia de los perros

Una vez que el cachorro esté seco, tendrá derecho a su primera mamada. Por lo general, el instinto y los movimientos de la madre son suficientes para que se ponga en contacto con las mamas; si no lo consigue, hay que ayudarle.


En los primeros momentos será calostro lo que saldrá de las mamas; este líquido, cuya secreción precede a la subida de la leche, es rico en proteínas y además contiene otros anticuerpos que protegerán al cachorro de las enfermedades durante las primeras semanas de vida, hasta el momento en que la vacuna tome el relevo (en realidad, el cachorro se beneficia de los anticuerpos de su madre mucho antes de nacer puesto que éstos atraviesan la barrera placentaria a través de la sangre).

Es importante que el cachorro mame lo más rápidamente posible pues su pared intestinal sólo dejará pasar los anticuerpos durante las primeras veinticuatro horas.



La lactancia de los perros recién nacidos


Al calostro le sucederá la leche que le aportará al recién nacido las calorías y los elementos indispensables para el crecimiento. Por lo general, la lactancia corre a cargo de la madre, situación ideal para el pequeño, pues así se le proporciona una alimentación perfectamente adaptada a su joven organismo.


Sin embargo, a veces es necesario recurrir a la lactancia mixta, ya sea porque la perra está débil, ya porque el crecimiento del cachorro resulta lento. También puede ocurrir que no haya más solución que una lactancia completamente artificial.

Es lo que ocurre cuando la madre sufre trastornos relacionados con la lactancia (masdds, crisis de eclampsia, etc.) o cuando la leche es insuficiente tanto en calidad como en cantidad. Y también cuando la perra rechaza las crías. Si el cachorro es todavía muy pequeño, habrá que darle el biberón. Pero en cuanto tenga quince días se le podrá poner la leche en un platillo para que beba a lengüetadas.



Tratándose de leche, se le puede dar leche maternizada preparada aunque también se le puede hacer una comida a base de leche concentrada no azucarada (el equivalente de un bote) con una yema de huevo, una cucharada de las de café con crema fresca y otra con miel.

Durante la primera semana, se le darán al cachorro ocho comidas al día, después se le dará siete durante la semana siguiente y así sucesivamente de semana en semana hasta llegar a tres o cuatro comidas diarias en el momento del destete.


A partir de entonces, el cachorro deberá adatarse a otra manera de alimentarse: necesitará, en efecto, absorber por separado los alimentos sólidos y los alimentos líquidos. El destete deberá ser progresivo. Si el cachorro vive con su madre, ésta última regurgitará para él su propia comida acostumbrándolo así poco a poco a la alimentación sólida.

Pero si esto no ocurre, se incorporarán progresivamente sustancias espesantes a la leche, como harina para bebés, croquetas (para perros) trituradas. Este régimen se irá reduciendo poco a poco hasta que el cachorro acepte las croquetas enteras. Durante ese período no hay que olvidar poner agua para que pueda beber.

Resulta más delicado pasar a la alimentación tradicional, compuesta de carne, arroz y legumbres; en efecto, el animal habrá de acostumbrarse a los sabores de los diferentes ingredientes y aprender a reconocerlas. En todo caso, la atracción que la carne ejerce sobre este joven carnívoro facilitará las cosas.

Inflamación mamaria en las perras

La inflamación de mamas, o mastitis, es una afección cuya importancia se subes¬tima muchas veces. Sin embargo, tiene una gran incidencia porque hace sufrir a la perra y puede contagiar a los cachorros que alimenta.


Aunque en la actualidad se conocen perfectamente los efectos de los tumores de mama (que representan el 50% de los tumores de la hembra) apenas se tienen en cuenta las repercusiones a que pueda dar lugar una mastitis. De ahí el interés por conocer mejor esta patología.


Problemas de la inflamación mamaria en las perras


La mastitis puede aparecer a lo largo de la lactancia después de un parto; excepcionalmente se puede observar en casos de lactancia de seudogestación (embarazo nervioso).





La perra que contraiga mastitis pierde el apetito, se vuelve triste, decaída, tiene fiebre, y por tanto presenta una aceleración del ritmo cardio respiratorio. Además, frecuentemente aparecen trastornos digestivos (diarreas, vómitos). Localmente, la mama se pone roja, dura, edematosa y la palpación resulta dolorosa.

La tumefacción parte de la base de la mama hasta invadirla toda y extenderse incluso al tejido cutáneo próximo. Cuando se presiona sale un líquido seroso o hemorrágico. A veces aparecen abscesos en la masa de tejidos de la mama.

Se forma pus y, cuando el absceso está maduro, se elimina progresivamente el ganglio dejando una cavidad rellena de restos de tejido conjuntivo.

En tal caso, los síntomas remiten y empieza a cicatrizar. Sin embargo, a veces el proceso degenera en gangrena que puede provocar la muerte al cabo de dos o tres días si no se aplica enseguida un tratamiento. Aunque, por fortuna, tal eventualidad es muy rara.



... Y EN LOS CACHORROS


La salud de los cachorros depende directamente de la calidad de la leche de la madre. Si ésta contiene gérmenes patógenos, los cachorros sufrirán enseguida trastornos (síndrome de la leche tóxica) que pueden provocar la muerte.

De modo de cuando los cachorros de una camada se debilitan, se quejan, sufren trastornos digestivos y cutáneos, hay que verificar la calidad de la leche de la madre. El síndrome observado en los cachorros es a veces el único síntoma de la patología de la mama de la perra.



Por regla general, hay que pensar en una mastitis cuando, sin razón aparente, los cachorros de la camada hayan perdido peso en veinticuatro horas o hayan dejado de aumentarlo dos días seguidos (el aumento ponderado es aproximadamente de un 10% diario en los recién nacidos).

En caso de duda, se hará medir el pH (grado de acidez) de la leche; ésta, que es normalmente neutra, se vuelve ácida en caso de mastitis. El examen bacteriológico, por otra parte, confirmará la presencia de agentes infecciosos en la leche que el veterinario examine.

Torsión y dilatación del estomago en el perro

La torsión-dilatación del estómago es un accidente que afecto sobre todo a los perros de tamaño grande. Se manifiesta bruscamente y es muy importante reconocer los síntomas pues la reacción del dueño ha de ser inmediata para evitar lo muerte del perro. Esto afección suele atacar preferentemente a animales golosos que comen demasiado deprisa. El ataque se suele producir después de la comida, sobre todo cuando a esto le sigue un ejercicio físico intenso. El perro sufre de pronto malestar general; el vientre se le hincha mucho, la respiración se hoce jadeante, las potos se separan y el animal intenta vomitar sin conseguirlo.


Ante tal cuadro clínico, hay que avisar inmediatamente al veterinario y llevarle urgentemente el perro a la consulta pues cada minuto es vital. Esta afección, lamentablemente clásica, consiste en uno dilatación excesiva y anormal del estómago, a la que sigue uno rotación según un eje acompañado de un vuelco según otro eje. Todo lo cual provoca una torsión del pedículo que irriga el bazo, el cual sufre uno dilatación por congestión.


También se producen importantes trastornos circulatorios, hemodinámicas y o menudo cardíacos.


Cuidados para la torsión y dilatación del estomago en el perro


La torsión impide que el contenido del estómago se elimine por delante (el perro no puede vomitar] ni por detrás. La reabsorción de los gases de fermentación lleva a la autointoxicación y el perro muere fatalmente si no se produce uno rápida intervención médica y quirúrgica que detenga y resuelva ese estado de shock.


Para evitar tener que hacer frente a un ataque de esta gravedad, conviene aplicor algunas medidas preventivas. Consiste, en primer lugar, en luchar contra lo glotonería del animal. Y paro ello hoy que darle dos comidas diarias en vez de uno sola, y así el animal dejará de arrojarse sobre lo comida. Otro bueno solución es la distribución de la comida en self-service si el alimento utilizado se presta a ello. Además, hay que evitar los ejercicios violentos después de los comidas. Por último, se han de vigilar los perros que tengan nefritis o gastritis crónicas.

Estos perros tienen tendencia o ingerir grandes cantidades de aguo lo que contribuye a lo progresiva dilatación del estómago, un factor que predispone a la torsión.

Polifagia

En el perro, la polifagia es principalmente .secundaria y representa una respuesta fisiológica a todos los estados en los que el organismo tiene un déficit calórico. Tales déficits calóricos pueden deberse a enfermedades crónicas o a ciertas terapéuticas.


Las principales enfermedades durante las que se estimula el apetito del perro son la diabetes sacarina, el síndrome de Gushing, los síndromes de mala absorción, la insuficiencia pancreática, la hipertiroidiasis, las hipoglucemias y algunos cánceres en estado avanzado.


Causas de la polifagia en perros


El apetito también puede ser estimulado por medicamentos, en particular la cortisona y sus derivados, algunos anticonvulsivos utilizados en el tratamiento de la epilepsia (gardenal, mysoline).


Las polifagias primitivas se deben a lesiones del centro de la saciedad que aquellas destruyen (tumores, traumatismos, infecciones...). Tales lesiones se observan sólo excepcionalmente.


Por último, existen lesiones del comportamiento alimentario que desembocan en la bulimia.

Prevenir enfermedades en el perro

Los objetivos de salud y rendimiento propios de la cría, hacen que el perro carezca de enfermedades específicas. Pero, a pesar de todo, quizá se ponga enfermo. Por este motivo aconsejable adoptar una serie de medidas profilácticas.


Cuando el perro haya pasado ya unos días con usted, llévelo al veterinario para que le realice un reconocimiento. Así, se irá familiarizando con el veterinario sin traumas y sin que exista una mala experiencia de por medio.


Calendario de vacunas-


Para protegerlo de peligrosas enfermedades infecciones, que incluso pueden ser mortales, el perro necesita vacunarse regularmente de por vida. Las vacunas que le pongan, se registran en el carné de vacunación que le proporcionará el criador cuando adquiera el cachorro.

A las ocho semanas el criador pondrá la primera vacuna al cachorro contra el moquillo, hepatitis, leptospirosis y parvovirosis. Una segunda dosis de esta vacuna se le administrará a las doce o catorce semanas, además de la vacuna contra la rabia. Después de cumplir el año de edad, se ha de volver a vacunar al perro contra estas enfermedades. Para poder participar en los concursos de las Asociaciones de perros de trineo, o para viajar al extranjero, ha de cumplir con el calendario de vacunación. Cuando compre su cachorro pida que le entreguen la cartilla de vacunación, donde se Indica el programa de vacunas durante la vida del perro.


Como prevenir enfermedades en el perro

Desparasitación-

Además de las vacunas pertinentes, una desparasitación regular también es importante, Si el perro tiene lombrices, estará debilitado y podrá contraer ciertas enfermedades, Así mismo, algunos tipos de lombrices pueden transmitirse a las personas. En este caso, los niños suelen ser los que mayor peligro de contagio corren.


La mayoría de las veces que los cachorros tienen lombrices intestinales, normalmente las han adquirido en el seno materno.


Por este motivo, el cachorro debe desparasitarse por primera vez a las seis semanas. La segunda desparasitación debe realizarse a las ocho semanas, anticipándose a la primera vacuna. El cachorro se desparasitará luego antes de ponerle la segunda vacuna, para repetir el proceso a los seis y a los nueve meses. El perro adulto debe desparasitarse dos veces al año.
Si hay niños pequeños en la familia algunos veterinarios recomiendan la desparasitación cada tres meses.

El veterinario será quien prescriba los medicamentos más eficaces contra los distintos tipos de lombrices, como las intestinales, o contra la tenia o solitaria. SI no se quiere desparasitar regularmente al perro, puede controlarse mandando examinar las heces periódicamente. Antes de su vacunación, debería desparasitarse siempre al perro. Otros tratamientos adicionales para evitar las lombrices, son incluso necesarios en el caso de que el perro tenga pulgas o si se dedica a cazar ratones a menudo. En este último caso, puede incluso transmitir al ser humano la temible tenia.



La piel y el pelo del perro-


Se denominan ectoparásitos a las pulgas, piojos, mosquitos, ácaros y garrapatas. Son parásitos que viven entre la piel, las orejas, etcétera. Las garrapatas chupan la sangre al perro; se extraen enteras con unas pinzas, o girándolas hacia afuera con los dedos, asegurándose de sacar la cabeza entera.


La infestación por parásitos se advierte por lo mucho que se rasca el perro, y, también, por la aparición de múltiples eccemas en la piel. Los piojos, las pulgas y los mosquitos se aprecian a simple vista, en tanto que los ácaros forman una capa de color marrón rojizo sobre la piel.

A excepción de que sean garrapatas, consulte con el veterinario en caso de una Infestación de ectoparásitos. Para su tratamiento, deben emplearse medicamentos y champús especiales; también, fumigar el entorno con insecticidas. Los cambios de la piel que se acompañan de eccemas, manchas rojas, pérdida de pelo, aparición de vesículas o bojas pueden ser síntomas de infecciones por hongos, sarna, trastornos hormonales o alergias.

La falta de cinc en el organismo, puede provocar la aparición de eccemas en la cara del perro.
En caso de que su perro tenga algunos de estos síntomas, necesita un tratamiento veterinario. Adopte unas medidas higiénicas preventivas en el tratamiento de su perro, pues algunas infecciones por hongos se pueden transmitir al ser humano.



El aparato digestivo-


Diarrea y vómitos: Si su perro tiene diarrea sin que observe deterioro en su estado general, suspenda su alimentación durante un día y dele sólo té natural; al día siguiente, impóngale una dieta de arroz cocido. Una diarrea fuerte que eventualmente curse con moco o sangre, fiebre o vómitos, debe tratarla un veterinario.

También es necesario llevarlo a la consulta si se repite el vómito, sobre todo acompañado de fiebre o estreñimiento; o si el perro sufre un deterioro de su estado general. Incluso hay que tratar sólo el estreñimiento, pues puede ser síntoma de una enfermedad grave.


Problemas agudos con el estómago: Si su perro salive, intenta vomitar y no puede, sufre de disnea o se le hincha la barriga después de comer, puede tener graves problemas con el estómago.

En estos casos, si el perro no se opera inmediatamente puede morir a las pocas horas. Para prevenir estos síntomas, procure no darle al perro grandes cantidades de comida de una sola vez y, después de comer, haga que repose durante una hora antes de corretear.


Los órganos de los sentidos-


El normal funcionamiento de los órganos sensoriales es muy importante para su perro, por eso deben controlarse regularmente.


La nariz: Si se lame los mocos y acompaña el estornudo con un flujo de sangre o pus, el interior de la nariz puede estar lleno de costras de pus. Consulte con el veterinario, pues la mayoría de las veces la causa se debe a un virus.


Los ojos: El enrojecimiento e hinchazón de la conjuntiva, la pesadez y abultamiento de la membrana nictitante y el lagrimeo purulento son síntomas de las enfermedades de los ojos.

Los efectos provocados por cuerpos extraños o bacterias en el ojo, pueden inflamar la córnea y volverla de un aspecto opaco que abarca una gama de tonos que van del humoso al lechoso. En el caso de las enfermedades de los ojos, el diagnóstico y su tratamiento también corresponde al veterinario.


Los oídos: Inclinar la cabeza hacia el lado de la oreje en cuestión, sacudir la cabeza, rascarse la oreja o la evidente sensibilidad del oído enfermo son los síntomas que revelan el padecimiento de una enfermedad de oídos. A menudo suele secretarse una sustancia maloliente; otras, se puede ver en el interior una capa oscura.


Las causas pueden ser diversas, por lo que también en este caso es preciso consultar al veterinario.